Google presentó su nueva red social. Después de algunos intentos fallidos, incluso cuando se trataba de proyectos muy ambiciosos, parece que ahora dió en la tecla. Aparece la comepetencia más grande para Facebook, al fin. Sumado esto a una potente estrategia gigante de unificar los servicios más utilizados de la actualidad como el buscador, GMail, Reader y demás. Y en Google Plus, como se denomina la nueva red social, abundan los comentarios de comparación con la más grande de las redes sociales, sobre cómo Google desarrolló un mejor producto, de las ventajas y características nuevas. Pero me llama la atención otro aspecto.
También abundan los comentarios sobre el tema de la cantidad de usuarios, de la masificación de la red social y de cómo eso va a afectar la actual "paz" de la nueva joya de internet.
Es curioso, por lo menos. Parece que estamos destinados a hablar de igualdad de oportunidades, pero nos molesta que todos los demás tengan acceso a lo que a nosotros tanto nos gusta. Hay un artículo que se titula "Por qué tu mamá no va a usar Google Plus. Y por qué eso me encanta.", que grafica exactamente la idea de la mayoría de los nuevos usuarios de la "Primera Generación" y cómo se sienten invadidos en su nuevo espacio. Se quedaron sin Twitter, ahora universalizado por el uso de famosos y millones de cholulos que los siguen. Se quedaron sin Tumblr y Orkut, porque sus modelos no demostraron ser lo suficientemente atractivos económicamente para hacerlos crecer. Y ahora la masa va por su último rinconcito, aunque éste sólo haya existido por menos de un mes. Las BlackBerry dejaron de ser para empresarios y freaks, para pasar a ser de modelos y futbolistas.
Habrá que ir saltando de novedad en novedad, para poder seguir teniendo el privilegio de pertenecer al selecto grupo que tiene acceso a lo más nuevo, y cuando la gilada le ponga sus manos encima, salir huyendo a buscar otro rinconcito, para no dejar de pertenecer. No?